Beneficios y riesgos de buscar ayuda psicológica
Buscar ayuda psicológica suele darse en momentos de vulnerabilidad. Cuando sentimos que la situación nos desborda, cuando lo que hemos intentado no es suficiente, cuando queremos prevenir un daño mayor o, simplemente, cuando deseamos entendernos mejor.
En estos momentos cruciales, surge una pregunta fundamental: ¿A quién le confías tus pensamientos más íntimos, tus miedos más profundos, tu dolor emocional?
El acompañamiento emocional informal: vínculos significativos
En muchos casos, recurrimos a personas cercanas: una amiga, la pareja, un familiar. Personas con quienes hemos atravesado momentos difíciles y que han demostrado ser un apoyo sólido. Este tipo de acompañamiento puede ofrecer consuelo y contención emocional, y el vínculo afectivo puede funcionar como un factor protector.
Sin embargo, es importante reconocer que estas personas no siempre tienen formación especializada, y aunque su intención sea ayudar, pueden —sin querer— aumentar el malestar o dar consejos poco adecuados. Además, pueden atravesar dificultades similares, sin necesariamente saber cómo afrontarlas. Aquí el riesgo es bajo, pero existe.
El riesgo de confiar en quien no está cualificado
En otras ocasiones, confiamos en figuras que aparentan tener respuestas: personas que inspiran confianza, que ofrecen soluciones rápidas, fórmulas generalizadas o “testimonios personales” como garantía de efectividad.
Aquí el riesgo es alto. Estas personas no cuentan con acreditaciones profesionales, pueden aplicar métodos no validados científicamente y, sobre todo, tienden a ignorar tu singularidad. La salud mental no admite atajos. Un abordaje superficial puede agravar el sufrimiento y generar nuevas problemáticas.
¿Qué hace diferente a un psicólogo cualificado?
Un psicólogo no solo trata síntomas: trabaja con el inconsciente
Un psicólogo cualificado es un profesional con una sólida formación académica y clínica. No se limita a aliviar síntomas; trabaja con el inconsciente, explora tu historia de vida, las repeticiones, los conflictos internos, y las dinámicas profundas que sostienen tu malestar.
Desde una orientación psicoanalítica, el terapeuta no te impone una solución externa, sino que te acompaña en un proceso transformador. El objetivo no es solo “sentirse mejor”, sino comprender el origen del sufrimiento, romper patrones y generar cambios duraderos.
Formación continua, ética profesional y trabajo sobre sí mismo
Un psicólogo clínico cualificado transita un largo camino:
- Grado universitario en Psicología.
- Especializaciones, másteres o doctorados en psicoterapia.
- Registro en el Colegio de Psicólogos y asociaciones académicas.
- Supervisión clínica y terapia personal constante.
Al igual que los médicos, su formación no termina nunca. Participan en seminarios, jornadas y congresos; revisan su práctica profesional y se trabajan a sí mismos en terapia, lo cual es fundamental para no contaminar la relación terapéutica con sus propios conflictos. Esta constante revisión garantiza una intervención ética, profunda y responsable.
¿Cómo saber si un psicólogo está realmente cualificado?
Elegir un psicólogo cualificado implica tener en cuenta algunos indicadores clave:
Señales de un psicólogo formado:
- Posee título universitario oficial y especialización en psicoterapia.
- Está inscrito en el Colegio de Psicólogos o instituciones equivalentes.
- Cuenta con experiencia clínica supervisada.
- Tiene un compromiso con la formación continua y la ética profesional.
- Evita fórmulas universales, respeta tu singularidad y trabaja desde tu historia personal.
Invertir en salud mental: un compromiso con tu bienestar
Optar por un psicólogo cualificado no es solo buscar alivio, es apostar por un proceso serio, profundo y transformador. La psicoterapia psicoanalítica no busca soluciones rápidas, sino una comprensión duradera que permita un cambio real en tu vida.
En Sens Psicología, somos psicoterapeutas con formación rigurosa, orientación psicoanalítica y años de experiencia clínica. Nuestra tarea no es decirte qué hacer, sino ayudarte a descubrir tus propias respuestas, comprender tus síntomas y transformarlos en recursos.
Confía tu salud mental a un psicólogo cualificado. Tu bienestar lo merece.